Yo controlo: espacio formativo para reconocer, prevenir y actuar frente a los distintos tipos de violencia
Las risas y la curiosidad acompañaron a cada una de las participantes en el proceso formativo “Yo Controlo” que se llevó a cabo durante cuatro meses en la ciudad de San Salvador. Un proceso dinámico que combina la modalidad online y presencial, a través de cápsulas formativas, vídeos, retos semanales, grupos de discusión por WhatsApp, y un taller práctico presencial mensual. Participaron un total de 30 jóvenes becarias de la Fundación Muchas Más.
En El Salvador, según el informe semestral Hechos de Violencia Contra las Mujeres del Sistema Nacional de Datos, Estadísticas e Información de Violencia Contra las Mujeres, hubo un total de 13,348 hechos de violencia en el primer trimestre del 2021.
Ivette es una joven estudiante de psicología, tiene pasión por ayudar a las demás personas y es una de las becarias de la Fundación Muchas Más que participó en el programa formativo desarrollado en el marco de la Iniciativa Spotlight, en conjunto con ONU Mujeres El Salvador. Ella con mucho entusiasmo describe que ha sido una experiencia muy gratificante, porque la información que les han impartido le ha ayudado a reconocer ciertos tipos de violencia que desconocía.
“Antes de esta formación desconocía completamente todo esto, y ahora tener esta información me ha ayudado a poner límites. Al menos en mi casa me ha ayudado a romper patrones que se vienen cumpliendo desde hace muchos años. Este tipo de formaciones son importantes porque de esta manera nosotras aprendemos y luego podemos ponerlo en práctica con otras personas afuera, con nuestras familias, nuestros vecinos”, agregó.
Durante el proceso las jóvenes recibieron formación en temáticas como los diferentes tipos de violencia (Violencia Psicológica y Emocional, Violencia Simbólica, Violencia Física, Violencia Económica y patrimonial, Violencia Sexual y Violencia Feminicida). Luego de que las jóvenes han mejorado sustantivamente su auto estima, auto confianza y fortalecido además sus capacidades para relacionarse con el entorno, se consideró oportuno empezar a cuestionar y a reconocer la violencia machista, aprender a marcar límites y transformar sus realidades a partir del conocimiento adquirido.
“Lo que más me ha gustado en el proceso formativo fueron los tipos de violencia y los videos, porque es una forma de aprender de manera creativa. También las actividades que nos dejan porque nos hacen reflexionar”, expresó Ivette.
Los talleres formativos se realizaron como parte del fortalecimiento a las organizaciones de mujeres de la sociedad civil, para prevenir y erradicar la violencia contra las niñas y mujeres y el feminicidio, a través de ONU Mujeres en el marco de la Iniciativa Spotlight en El
